En el Club Deportivo Escuela Breogán creemos que el deporte debe ser una escuela de valores que sirva para toda la vida. Para conseguir esta meta la educación deportiva debería ser una responsabilidad tanto de padres, hijos y educadores.
Practicar deporte contribuye a nuestro bienestar personal, algo que en la infancia llega a ser aún más importante. Por eso en el Club Deportivo Escuela Breogán defendemos que la calidad de la educación deportiva y futbolística debe estar al mismo nivel que la educación social y emocional.
Para conseguir este objetivo es importante la colaboración de los padres. Si tenemos un hijo al que le gusta algún deporte tenemos la oportunidad de enseñarle muchos valores, como la disciplina, el esfuerzo, el espíritu de superación, el respeto y el compañerismo. Todo esto se aprende dando ejemplo durante los partidos de fútbol, baloncesto, o el deporte que practiquen nuestros hijos. Por eso en las gradas es muy importante no avergonzarles porque así desde jóvenes aprenden que en la vida no se puede ganar siempre.
Precisamente, con el objetivo de transmitir a los padres lo importante de ser respetuosos mientras sus hijos practican deporte, queremos compartir la campaña “Con respeto ganamos todos” de la Fundación Deportiva Municipal de Valencia, que entre sus iniciativas destaca este interesante decálogo.
1.- Acompaña a tus hijos a partidos y entrenamientos siempre que puedas.
2.- Tu presencia, un aplauso o una mirada cómplice pueden ser mejor que estar gritando todo el tiempo.
3.- Colabora con tu club para que sea un referente en juego limpio.
4.- Los árbitros son personas que aciertan y se equivocan. ¡Respétalos!
5.- Evitar conflictos con otros padres ayuda a generar un clima positivo fomentando una buena relación, también con árbitros y entrenadores.
6.- Recuerda a tu hijo que el resultado no es lo más importante. Pregúntale si ha hecho amigos y si se lo ha pasado bien.
7.- ¡No le presiones! Lo importante es la diversión, el trabajo en equipo, la superación y la adquisición de hábitos saludables. Si tiene cualidades llegará lejos.
8.- No es bueno castigarlo/a sin hacer deporte. Busca otra manera de que cumplan con sus obligaciones.
9.- Evita conductas inapropiadas en espectáculos deportivos y contribuye a la correcta utilización de las instalaciones deportivas.
10.- Confía en los entrenadores, profesores y monitores. Está claro que una actividad física conlleva algunos pequeños riesgos, pero ellos son profesionales y están capacitados para minimizarlos.